¡De vuelta!

Aunque el letrerito que puse (y que aun no quité) reza que volvía el día 5, no ha sido hasta esta semana cuando se me ha quitado el trauma postvacacional. Quizás os suene raro, pero después de estar una semana entera de vacaciones haciendo miles y miles de fotos es que quedas de la cámara y la fotografía hasta las narices; por eso he tardado en volver, porque hasta hoy no tuve estomago para empezar a revisarlas y organizarlas. La fotografía es un Hobby: eso está claro. Y a nosotros los fotógrafos nos encanta (supongo) probar nuevos lugares para hacer fotografía, ir con tranquilidad, tomarse su tiempo haciendo las fotos, etc. Pero claro, si vas con prisa (como suele pasar cuando vas en familia y no sienten la misma pasión que tu por la fotografía) ya se ha jodido un poco el asunto, porque dices "anda, mira que fotón, desde este ángulo va a quedar genial", y cuando te das cuenta estas en medio de la calle solo y con tu familia a 200 metros haciendo gestos todos enfadados porque no vamos a llegar a ver tal museo.

Luego, no se si os pasará también a vosotros, esta lo de la inspiración; a mi hay días que voy por la ciudad con la cámara y es que "ni pa lante ni pa trás", no consigo sacar una foto buena, ni conseguir buenos ángulos, ni nada. Y sin embargo otros empiezo por una foto y no paro.

Y a parte de eso también esta el clima; por ejemplo, aquí en mi ciudad siempre le da, y es que da igual que época del año sea, al cielo por llenarse con una gigantesca capa blanquecina de nubes homogénea, osea, que haber hay nubes diferentes pero están todas como pegadas. Como es de esperar el sol ni se vé, solo una mancha luminosa muy fuerte que irradia fotones y que pasan a través de las nubes dando lugar a una luminosidad, en mi opinión para hacer fotos, horrible.

Y también que decir de la temperatura; si es muy fría se que congelan las ideas al hacer la foto, la bateria se te agota antes, tiritas como un flan y la fotos suelen salir mas movidas, bueno, eso si consigues manejar la cámara con los dedos todos entumecidos por el frío o con unos guantes. También está el calor, que para la bateria es mejor, aunque relativamente, ya que como uses mucho la cámara se apaga sola para evitar "daños" por el calor, luego se te paga la correa al cuello con el sudor, además de que estas constantemente pensando lo bien que estarías a la sombra de ese árbol en vez de estar sacando una fotografía a la una de la tarde en medio de una plaza y a pleno sol.

Ahora, una semana más tarde, iré poniendo cada día nuevas entradas de las mejores fotografías de los lugares en los que estuve, y también intercalaré alguna de esa serie de entradas que dejé un poco a medias: el Muro.